Por Vicente Estrada Torres.
Hoy 1 de julio se cumple un año, que México tomo una decisión letal para los políticos tradicionales, con la que supuestamente le dieron un giro de 180° a la política mexicana, donde los partidos políticos no se prepararon para la más rotunda derrota que jamás hubieran imaginado y menos el partido en el poder y su candidato; quienes teniendo evidencias claras de que no estaban siendo apoyados por su primer priista en ese momento, aun así siguieron, sin dar un golpe de timón y deslindarse del político que los había llevado a ese estadio de odio y desconfianza, por todo lo que los medios de comunicación en ya una componenda con AMLO, desde que en una malísima decisión, dejo crecer sin actuar, en la muerte de los jóvenes de Ayotzinapa y poco después la compra de la casa blanca, que le dio la puntilla a EPN y a su partido el PRI.
Pero bueno eso es cosa juzgada por la sociedad y nadie en ese momento de tomar una decisión tan trascendental en la vida política de este país, se imaginó que a quien le habían dado la confianza les daría la espalda, una vez tomado el gobierno de manera formal y menos quienes siendo gente aparentemente pensante, votaron por quien nunca habían tratado más que superficialmente, aunque lo habían visto ser oposición y un muy buen político opositor, jamás se fijaron que cuando está en el pódium o al frente de un contingente, se le saltan los ojos y tiene actitudes demenciales.
Pero también nunca se fijaron que sus discursos siempre versaron en la destrucción de las estructuras creadas durante décadas, ya que ustedes recordaran el mandar al diablo las instituciones, nomás que en esta ocasión se rodeó de gente de poder y de dinero, como Alfonzo Romo, Carlos Slim, Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego, quienes seguramente le aconsejaron que cambiara el discurso y cosa rara les hizo caso y cambio el discurso por el de “amor y paz”, “abrazos no balazos” y que no perseguiría a nadie por venganza o que él y no haría cacería de brujas y la gente le compro el discurso.
No solo por el cambio de discurso, sino que empezó también a decir de los apoyos que daría a gente de la tercera edad, ninis, becas a estudiantes y otras dadivas; lo que si nunca dijo como manejaría la economía para lograr mantener la estabilidad económica de la que bien o mal tenía el país y cómo recaudaría impuestos sin incrementarlos, simplemente se mantenía en un discurso repetido de decir que lograría recuperar $700, 000,000, 000. 00 combatiendo la corrupción y bajando los salario, aunque tampoco dijo como lo haría. Hasta que empezó a gobernar, cuando Enrique Peña en una actitud, poco usual le dejo las principales decisiones a AMLO, empezando por liberar a Elba Esther Gordillo y otros presos y gente que estaba en otros países que habían delinquido a quien les perdono y acerco a su gobierno.
NADA QUE FESTEJAR.
Unos estarán de acuerdo otros no, pero considero que a un año del triunfo de MORENA-AMLO no hay nada que festinar, salvo algunos dichos que se han quedado para mal recordarlo. Pero siendo honesto sin prejuiciar lo que escribo, yo invitaría a quien esto lee que me indicara que decisiones ha tomado que no signifiquen destrucción de las estructuras creadas en este país por el simple hecho de haber sido formadas por sus antecesores, a quien dice odiar, pero tiene mucha gente a su alrededor que fueron parte de la llamada por él, la mafia del poder. Al menos que salir todas las mañanas, para ofender a quien se le pone enfrente, sea para festejar algo.
No dudo que hoy por la tarde haya una concentración en el zócalo, con gente acarreada que está en los programas de lo que él llama bienestar, que es agradecida con su bienhechor, que seguramente a mano alzada le contestara positivamente, lo que él quiera que le contesten, pero que aunque lo niegue todo mundo está al tanto de todas las malas decisiones que han hecho que este país, retroceda en la creación de empleos a siete meses de gobernar, al grado que quieren meter a la estadística a los ninis que tienen en supuesta capacitación, por verlos dado de alta en el seguro, sin pagar cuotas de afiliación.
El haber tirado a la basura $140,000,000,000.00 que están incrementando la deuda del país, por la cancelación del NAIM, o por haber quitado las estancias infantiles o por estar despidiendo a tanta gente de las instituciones, no se ha recuperado ningún peso por el combate a la corrupción, ni ha metido a nadie en el bote por corrupción, salvo algunos casos que ha litigado en las conferencias mañaneras, salvo de allí nada. Luego entonces si hay algo que festejar me avisan y lo festejamos.
Gracias, hasta la próxima.